Conoce más sobre mi

Seguramente sea un poco como tú…

Si estás aquí, seguramente sea por la misma razón que a mí me tenía atormentado cada día al despertar.

Llegó incluso un punto en el que ni quería despertar de la cama, estaba mucho mejor durmiendo.

Sentía que me había estancado con mi negocio, no te puedo decir que me iba mal, de hecho me iba bastante bien, habían meses flojos y meses bastante buenos.

Pero en general no me iba mal.

Pero lo que quería de verdad era tener un negocio digital en el que poder delegar ciertas tareas y hacerlo escalable.

Quería poder pasar más tiempo con mi pareja o mi familia, porque ya no podía seguir así, me tiraba de Lunes a Domingo trabajando desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche.

Y cuando salía a la montaña o a tomar algo con los amigos no podía dejar de mirar el móvil por si algún cliente necesitaba algo de mí, o por si alguien me había hablado para contratar mis servicios.

Lo que de verdad quería era sentir que estaba construyendo un negocio que me diese mi libertad, pero lo que sentía era que estaba fabricando los barrotes de mi propia prisión.

Con dinero, sí, pero… ¿A qué precio? Para qué quería el dinero si no podía gastarlo en las cosas que me hiciesen sentir bien…

El problema era que mis precios eran muy bajos y eso me obligaba a tener que hacerlo todo yo, como tenía precios tan bajos no me daba margen para delegar y hacer un negocio de verdad.

Ese tipo de negocio en los que consigues transformar a tu cliente porque puedes darle todo lo que necesita para ser un caso de éxito.

Y aquí viene el problema.

No sabía cómo subir los precios de mis servicios porque mis clientes actuales me iban a dejar de contratar, pues ya había establecido una relación comercial con esos precios.

Y tampoco me atrevía a subir los precios sin ninguna razón porque me sentía un estafador, aunque sabía que mi servicio lo merecía.

No porque lo hubiese comparado con mi competencia, sino porque el resultado que le daba a mis clientes era tan bueno que era incluso recomendado.

Hasta que un día me contrató mi primer cliente con un lanzamiento grande, ese cliente era AntonioG, para lanzar su Escuela Nómada Digital.

En ese lanzamiento aprendí cuál era la estrategia que usaban los grandes negocios para vender sus ofertas de alto valor.

Después de ese lanzamiento (que fue todo un éxito) empezaron a llamarme para más lanzamientos grandes con las mismas ofertas, de alto valor.

Ahí detecté el patrón, todos los negocios digitales que se convierten en grandes empresas saben crear y vender ofertas de alto valor.

Negocios como…

Roberto Gamboa, es director del instituto de tráfico online donde su matrícula es de alto valor. En su programa enseña a las personas a desarrollar su profesión como Trafiker.

Cesar Rivero, tiene un programa de mentoria de alto valor en él te lleva de la mano a montar tu propio negocio con bienes raíces.

Otro caso es el de Adrián Bernabéu, es el director del Máster de inversores, con un precio en su matrícula de alto valor. En su escuela se dedican a formar a las personas para que aprendan a mover su dinero de forma efectiva.

Yo al inicio creía que para tener un producto de alto valor necesitaba ser un referente en mi mercado pero, déjame decirte un pequeño secreto, en realidad es totalmente al revés.

Te conviertes en el referente de tu sector creando una oferta de alto valor, la razón es porque al tener este tipo de oferta te conviertes en el cirujano de tu sector al instante.

Actualmente me contratan agencias grandes de lanzamientos para que les asesore en la estrategia de sus clientes más grandes.

Y por eso justamente pongo mi empresa a tu servicio, porque esto que hacen las personas que me contratan también lo puedes hacer tú con tu negocio.

No es fácil, requiere de esfuerzo y compromiso, no te voy a mentir.

Ahora, más esfuerzo y compromiso requiere vivir preso de un negocio que te tiene esclavo de él, que no te permite disfrutar de los buenos momentos de la vida.

Mi misión y mi objetivo es que puedas vender tus ofertas de alto valor como hacen los referentes del sector para vivir la vida que de verdad sabes que te mereces.

Si estás aquí es porque has sentido la llamada, a llegado la hora de dar ese cambio que tanto deseas.

Ha llegado el día en el que apuestas por ti, pero esta vez de verdad, sin quedarte a medias.